jueves, 24 de octubre de 2013

Objetos



Él le regaló unas gafas de natación y unos pendientes.

Cuando él se fue, ella perdió un pendiente y las gafas se rompieron por el puente.

No puede decirse que no fuera una ruptura consumada.

Uol

6 comentarios:

  1. Estaba todo predestinado...

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    1. ¿Crees en la predestinación? ¿Y qué hay del libre albedrío?

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  2. Casi consumada.
    Porque queda el otro pendiente, suponemos que el de la foto.
    ¿Quedará como único testigo y recuerdo de lo que un día hubo?
    Un abrazo

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    1. ¡Mal vamos si lo único que permanece en nosotros es un objeto para recordarnos la llama! Pero es cierto que a veces un objeto desata toda una riada de recuerdos.
      Abrazos.

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  3. A veces de algunas personas sólo nos quedan recuerdos en forma de objetos. Y a veces esos recuerdos están desparejados, como un pendiente solitario...pero ahí están. Beso.

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    1. Desparejados o divididos en dos partes. Y una piensa: ya está. Todo se perdiò.
      Por suerte, mi disco duro borra (casi) todo lo malo y conserva lo bueno. Será por aquello de dejar espacio...

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