miércoles, 24 de abril de 2019

Caminos trillados



CAMINOS TRILLADOS

Atrás quedaron los tiempos
en que ser valiente era noble causa.
La vida consistía entonces
en creerse original.

Hoy sólo unos pocos se salvan.

Los demás transitamos
los mismos caminos trillados,
idénticos derroteros.

La misma prudencia, los mismos ritos.
El mismo desencanto.
                                    La misma soledad.

Anay Sala: Ý (turno de réplica)

viernes, 12 de abril de 2019

Ocurrente



Estaba tomando una copa junto a Mericia para despedirnos hasta la vuelta de vacaciones cuando él traspasó el dintel del bar y se sacudió de la cazadora las inoportunas gotas de aquel chaparrón repentino (aunque del que habían comunicado las aplicaciones pertinentes que había un 65% de posibilidades de suceder). 


Le clavé la mirada y experimenté esa subida hormonal que siempre identifico con aquellas roldanas de los dibujos de Erase una vez el hombre que elevaban las vigas medievales hasta lo alto de la catedral, y que los hombres sabrán reconocer con los síntomas de una clara e involuntaria erección. 

Clavé, repito, mis pupilas en aquel ejemplar, y en el momento en que Mericia reorientaba su mirada hacia la dirección de la mía, exclamé: 

Baby, hoy no vamo'a dormí! 

La señora de enfrente fue bastante indulgente cuando mi amiga la alcanzó al escupir inesperadamente el generoso trago de gyn tonic que tenía en la boca.

Uol

Ocurrente: que tiene ocurrencias (ideas inesperadas).

jueves, 4 de abril de 2019

Elfo

Marco Hietala


Cuando lo vi, pensé en mesetas áridas arrasadas por el viento gélido; en glaciares y cascadas congeladas. Pero sobre todo y por encima de todo, vi en él la vívida representación de un elfo juguetón.

Busqué fotos, visioné actuaciones. En todas aparecía él, con su largo pelo lacio, dorado; con su barba trenzada, su mirada ahora seria, ahora pícara. Pero no es islandés, es finés. Da igual, quién sabe si sus ancestros llegaron desde la isla congelada a tierra firme. Un elfo dorado de apellido helado. No es descabellado.


Busqué su biografía. ¿Qué será tener un papá como él? ¿Que te vaya a recoger al cole un elfo dorado que encima toca la guitarra? 

Miro sus fotos públicas, comparo edades. No puedo dejar de mirarlo. Y vuelven a mi mente los lagos, los bosques húmedos, lava petrificada, los fiordos... los últimos rayos de sol antes del ocaso ocultándose en su cabellera rubia. Ese sol frío. ¿Puede una persona encarnar un paisaje, un clima, un país? 

Eso es para mí Marco Hietala, una isla helada en el mapa, una emoción, una luz suave, un deseo de tocar ese cabello, de trenzar esa barba. 

Irracional, lo sé.

Uol